Todos sabíamos que el Caspe venía de estar pasando una mala racha que, obviamente, emocionalmente estaba empezando a afectar a todo el equipo e, incluso, al cuerpo técnico.
Mi labor se ha limitado a cederles esos espacios y esos ratitos para poder expresarse, para poder conocerse, y, por supuesto, analizar qué era lo que estaba pasando.
Pero ya no tanto para centrarnos en eso sino para enfocar en lo que ellos sabían hacer, en lo que habían hecho otras temporadas y volver como a conectar con esa dinámica ¿no?
Y, sobre todo, trabajando mucho la comunicación entre ellos y la cohesión de equipo, que yo creo que es fundamental, tocar esa parte cuando el equipo, muchas veces, también, ante malas rachas puede ir distanciándose poquito a poco.
Recalcar que todo esto ha funcionado gracias al compromiso que tiene el equipo que, creo, que eso se ha visto también partido a partido y gracias a que ellos me han hecho formar parte de esto, creo que, lo poquito que hemos podido trabajar estoy segura que les ha servido de algo y eso ha sido lo que ha hecho que todo esto haya funcionado.